Mostrar el registro sencillo del ítem

dc.contributor.advisorGarcía Carrasco, Joaquínspa
dc.contributor.authorFonseca Velasco, Antoniospa
dc.contributor.otherUniversidad Pontificia de Salamanca;spa
dc.date.issued1975spa
dc.identifier.citationp. 114-116spa
dc.identifier.urihttp://hdl.handle.net/11162/27605
dc.description.abstractExaminar el complejo de Edipo. Expone el complejo de Edipo según Freud, analiza la simbología de Edipo y la repercusión que ha tenido en Freud dicho complejo, y después estudia las diferencias entre la situación edipiana y el complejo de Edipo. 1) Los problemas afectivos con los que cada niño se enfrenta en los primeros años de su vida, son de inusitada trascendencia en el desarrollo ulterior de la personalidad. Durante estos años se fijan los cimientos de la maduración afectiva y alrededor de éstos se va modelando el carácter del niño. 2) El niño depende de sus padres, de su amor, comprensión y aceptación, así como de la capacidad que tengan para ayudarle a adoptar actitudes que le permitan afrontar y resolver sus conflictos. Es muy estrecha la dependencia del mito en relación con la afectividad de los padres, y el clima emocional que ellos le proporcionan puede contribuir al desarrollo del niño o por el contrario, entorpecerlo y dificultarlo. 3) Si el niño no encuentra en sus padres la ayuda que precisa para lograr un equilibrio entre sus deseos contradictorios, su afectividad o no se desarrolla o se desarrolla mal. Otras veces, su desarrollo evoluciona, pero con el lastre de una insatisfacción más o menos total, arrastrando a lo largo de su vida una debilidad caracterial que no podrá superar los traumatismos que inevitablemente comporta la vida, pudiendo experimentar represiones o mutilaciones importantes ante situaciones de cierta envergadura conflictiva. 4) En el período genital, el niño puede y debe salir de sí mismo. El varón debe renunciar al mismo tiempo a la madre deseada y a eliminar al padre omnipotente. La mujer debe renunciar al padre y aceptar dejárselo a la madre. Estas operaciones se realizan en el plano inconsciente. 5) La cesión de los padres es ayudar al niño a resolver la angustia de la situación triangular incestuosa facilitando la huida en lo que en ella hay de poralizante, para que conserve solamente aquello que le posibilite el dominio y la afirmación de sí. Por lo tanto los padres no deben intervenir aquí directamente sobre una modalidad pedagógica, sino ofrecer al niño una relación afectiva suficientemente vigorosa, que sea inaccesible a la agresividad o al chantaje afectivo; de esta forma la situación edípica lleva al niño a encarar la relación humana y a asumirla de una manera menos captativa. De ahí el retroceso de la subjetividad posesiva. Los padres y su intimidad son considerados como más exteriores y fuera de la omnipotencia mágica del deseo. 5) Al dar por perdido el deseo de la madre inaccesible y admitir al padre prohibitivo, acepta lo que representa el padre como fuerza y sujeción. Inconscientemente admite las relaciones sexuales entre los padres y la primacía del padre sobre él. Se sitúa así en la cadena de generaciones. 6) Pero toda esta serie de aceptaciones y renunciamientos angustiosos sólo pueden ser soportados si el yo del niño está bastante fortificado por la seguridad brindada por el amor y la ternura que ligan a los padres con el niño, a condición de que este amor de los padres sea sano es decir, ni posesivo ni agresivo. Estas operaciones se realizan en primer lugar por las interiorizaciones de las prohibiciones paternas que refuerzan el super yo y luego por la identificación con el padre rival en forma de imitación de un modelo ideal exterior que se convierte en el yo ideal. 1) Sin ánimo de negar, ni siquiera discutir, la relación de vinculación primaria u objetal con la madre y la ambivalencia de los sentimientos con respecto al padre, ambas cosas afirmadas y descubiertas por Freud, hay que decir que el creador del psicoanálisis se excedió al llevar a sus últimas consecuencias estas tendencias del niño, más aún acaba por definirlo como un perverso polomorfo. Se excedió, también al universalizar esta situación tal como él la entendió. De igual modo se excedió al considerar que todos los hombre son o están enfermos, aunque no lo diga tan crudamente, de la lectura de sus obras difícilmente podemos sacar otra conclusión. 2) El complejo de Edipo ha dejado de ser tema tabú, al que sólo con ser pensado se pecaba de morbosidad. Y aquel tema que todo el mundo consideraba tan abstracto y poco corriente, se ha convertido en el nódulo estructurador de la personalidad, es decir, en el tema central de la Pedagogía como ciencia de la posibilidad del hombre ante su tener que hacerse desde su inacabamiento desde la prematuridad de su nacimiento. 3) El complejo de Edipo se ha convertido en una situación edipiana de la cual afirmamos su existencia y su universalidad.spa
dc.format.extent116 p.spa
dc.format.mediumLibrospa
dc.language.isospaspa
dc.rightsCuando no se especifique otra condición, los documentos incorporados a Redined a texto completo, se hallan bajo las condiciones de uso de sólo lectura y únicamente podrán ser citados con reconocimiento del autor(es). Para cualquier otro uso, deberá solicitarse el permiso del autor (es)spa
dc.subjectcomplejospa
dc.subjectpsicoanálisisspa
dc.subjectdesarrollo del niñospa
dc.subjectdesarrollo afectivospa
dc.subjectrelación padre-niñospa
dc.subjectamorspa
dc.subjectafectividadspa
dc.subject.otherSigmund, Freudspa
dc.titleEl complejo de Edipospa
dc.typeTesinaspa
dc.audienceProfesoradospa
dc.bbddInvestigacionesspa
dc.date.provenance1990-05-01T10:10:10spa
dc.description.locationUniversidad Pontificia de Salamanca. Facultad de Ciencias de la Educación; Calle Compañía, 5; 37002 SALAMANCA; 923277118;spa
dc.description.paisESPspa
dc.educationLevelEducación Superiorspa
dc.identifier.signaturaCL P. 524spa


Ficheros en el ítem

FicherosTamañoFormatoVer

No hay ficheros asociados a este ítem.

    Mostrar el registro sencillo del ítem